Las obras para transformar en apartamentos turísticos el faro de Ribadesella empezarán en 2024

La transformación del faro de Ribadesella en un espacio de uso turístico como alojamiento vacacional de lujo no se hará realidad hasta el año 2025. Floatel España, la mercantil que ya trabaja en la redacción del proyecto de ejecución, espera iniciar las obras en septiembre u octubre de 2024. Es decir, los dos apartamentos turísticos proyectados abrirían sus puertas a lo largo del año siguiente. «Si pudiese ser antes, nosotros somos los primeros interesados en empezar cuanto antes, pero a día de hoy esa es nuestra previsión», afirmó Olimpia Isla, arquitecto y encargada de la expansión de la empresa en España.

En el mes de marzo pasado, la Autoridad Portuaria de Gijón aprobaba la concesión administrativa de una parte del edificio para un período de 35 años y desde entonces, todo está en marcha. El faro mantendrá su uso tradicional como torre de señalización marítima, «principal atractivo para los futuros clientes» y se le incorporará el uso turístico mediante la recuperación de las zonas del inmueble que han quedado en desuso. En ellas se crearán dos espacios habitacionales en los turistas «experimentarán una vivencia como fareros del siglo XXI», añadió Isla.

Para desarrollarlo, Floatel España solo dispone de 242 metros cuadrados construidos, una superficie útil de 164 metros. Además, «ni queremos ni podemos ampliar esa superficie». La idea pasa por evidenciar cómo era la vida de las dos familias de fareros que se relevaban en el servicio, «devolviéndole el sentido original a la edificación». Es decir, no quedará espacio para habilitar un aula dedicada a El Cachucho. Habrá referencias a esta primera Área Marítima Protegida de España a la entrada del faro como una «especie de homenaje» y los espacios comunes del interior recogerán la historia del faro y sus fareros.

La construcción cuenta con un jardín exterior de más de 4.500 metros cuadrados de superficie, «aunque solo es aprovechable menos de la mitad, ya que tiene una zona de acantilado muy marcada donde poco se puede hacer». El objetivo pasa por mantener un jardín atlántico bien cuidado para el recreo de los clientes, sin edificaciones anexas y con espacios para el estacionamiento de sus vehículos. También se contempla la creación de una piscina y «algún mirador en la zona más alta para disfrutar de las vistas».

En la actualidad, Floatel España está trabajando en la rehabilitación del faro de Cudillero con la intención de abrirlo en la primavera de 2024. «Consideramos que este es un tipo de turismo muy rico, porque es atemporal. Además, al ser chiquitito y de pocas plazas, atrae a todo tipo de clientela, es un turismo de celebración. Creemos que los faros de Ribadesella y Cudillero van a ser dos fuerzas complementarias que van a funcionar muy bien», añadió Olimpia Isla.

Según Sabino Martínez, presidente de la Asociación Riosellana de Turismo Rural (Aritur), el proyecto del faro servirá para fortalecer y enriquecer la oferta turística del concejo y la comarca. «Ya tenemos turismo rural, turismo de Paradores, turismo activo y ahora llega esta modalidad más exquisita. Así que, si tiene todas las licencias acordes, bienvenido sea», afirmó.

Este empresario turístico confía en que el verano de 2023 supere en cifras al del año pasado. La primera quincena del mes de junio ha contado con «buenos fines de semana gracias a los eventos que se organizan en la comarca» y el objetivo pasa por extender la temporada «hasta finales de octubre con buena ocupación». Todo dependerá de la meteorología, «aunque aquí la gente viene buscando otras cosas», añadió Sabino Martínez.

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