Aumenta el uso de fármacos sedantes entre los jóvenes asturianos
Las Jornadas de la Sociedad de Psicología Clínica regional analizan en el San Agustín el sufrimiento psíquico de niños y adolescentes
BORJA PINO
AVILÉS.
Domingo, 27 de marzo 2022, 12:41
Toda mente, por fuerte que sea, cuenta con un punto de ruptura que, en caso de ser alcanzado, propicia el desarrollo de trastornos. Y ese punto es mucho más accesible en el caso de los jóvenes; sobre todo, tras experiencias tan azarosas vividas durante la covid. Todo ello focalizó ayer las V Jornadas de la Sociedad de Psicología Clínica de Asturias (SOPCA), celebradas en el Hospital San Agustín, y que, a lo largo de varias charlas y coloquios, analizaron el sufrimiento psíquico de los niños y adolescentes de la región.
Más de un centenar de personas, cifra inesperada y satisfactoriamente elevada para SOPCA, asistieron a un evento que se prolongó durante la mañana y la tarde, y que puso sobre la mesa algunos hechos inquietantes. Uno de ellos es el incremento del uso de fármacos hipnosomníferos y sedantes entre la juventud, motivado, en buena medida, por los efectos de la reciente crisis sociosanitaria, en forma de ansiedad y preocupaciones constantes.
«La pandemia ha propiciado una reducción del consumo de alcohol, tabaco y cannabis, pero, a la vez, un aumento del de esas otras sustancias», explicó Antón González Fernández, al frente del Observatorio de Drogas asturiano. El crecimiento, aunque lento, es constante, y sigue una estela ya iniciada en 2008, tras el estallido de la crisis económica, hasta alcanzar un 5% más desde marzo de 2020, con las mujeres duplicando e, incluso, triplicando el consumo frente a los hombres. Así las cosas, González teme que puedan surgir generaciones enteras habituadas al uso de esos fármacos. «Todo lo que sea normalizar el consumo de una sustancia es un factor de riesgo», concluyó.
También los trastornos alimenticios están viviendo un auge. Sobre ello disertó Clara Vicente Palacios, psicóloga clínica del HUCA especialista en dicha materia. «Ya no son sólo la anorexia o la bulimia, sino una amalgama de cosas», resumió, acostumbrada a tratar a «chicos con conductas restrictivas, en infrapeso y que se purgan». Y las familias no siempre ayudan, pues «a menudo creen que son cosas de la adolescencia. No es fácil ver que tu hijo está teniendo un problema, por eso es frecuente que lleguen demasiado tarde a las consultas».
¿Cómo lidiar con ello? Con más profesionales y recursos, cuestión que abordó María del Mar Fernández Fernández, jefa de la unidad de coordinación del Programa Marco de Salud Mental de Asturias. «Desde 2015 hemos pasado de 41 psicólogos clínicos en Asturias a 81, y veinte se contrataron entre 2020 y 2022», resaltó. No obstante, acotó que «no es suficiente. La bolsa de profesionales está vacía y necesitamos más residentes».