La abuela asturiana que inspira en Londres
Una compañía teatral británica crea dos libros de ejercicios para mayores a partir de la experiencia de una vecina de Oviedo de 78 años
m. f. antuña
Miércoles, 22 de julio 2020, 03:24
Pepita Peláez tiene 78 años, vive en Pumarín, en Oviedo, y es una mujer animada y social, que disfruta del barrio, que le gusta tomar su cafetín en el bar de siempre y hacer la compra en el súper. Vive sola y cuando llegó la pandemia y, por ende, el confinamiento se fue con su hija a Cenero para estar más acompañada y en un espacio más abierto. Pero lejos de venirle bien, ella se vino un poco abajo.
Tenía a la familia preocupada, entre ellos, a su nieto Daniel Mariño, actor asturiano afincado en Londres y que trabaja en el ámbito del teatro social. En la distancia, Daniel veía cómo su abuela dejaba de comer y cómo los ancianos con los que trabajaba en Inglaterra con la compañía Bubble Theather en los Creative Elders Programmes, que buscan la inclusión a través de las artes escénicas, también se venían abajo. El forzado confinamiento les privó de ese encuentro con los actores que animaba sus horas. Hasta que un buen día llegó una solución para todos.
Pepita, que es para la familia Tatita, está siempre en la boca de Daniel, que adora a su abuela y encontró en ella la inspiración. Y se puso a trabajar con Lucy, Ella, Jade, Eric, Mel, Florence y Michael para darle alternativas a sus mayores. «Estábamos preocupados por ellos e intentamos buscar maneras de poder seguir conectados, para no abandonarlos en estos momentos de crisis. En una de las reuniones les comenté que Tatita estaba triste y hablé de una conversación que tuve con ella sobre los arcoíris que todo el mundo había empezado a poner en las ventanas para repartir positividad, y a partir de ahí se nos ocurrió diseñar un pack de actividades creativas inspiradas en los colores del arcoíris. Nos pusimos a trabajar, estuvimos tres o cuatro semanas y diseñamos entre todos una serie de actividades para que nuestros mayores hicieran desde sus casas. 'El arcoíris de Tatita' es el título de un libro que se imprimió y se envió a los mayores londinenses del proyecto por correo postal. Pero antes de llegar a ellos, Daniel, mediante videoconferencia, probó con Tatita todas esas propuestas. «Cada día nos centrábamos en un color diferente, proponemos buscar objetos que se correspondan con ese color y luego una actividad que puede ser contar una historia, escribir un poema, cantar, bailar... Mi abuela nos ayudó a probar las actividades y ver si funcionaban y me ayudó después con la traducción al español», relata Mariño.
Hubo ese primer libro en inglés y con el tiempo y viendo que la pandemia no daba tregua se decidieron a traducirlo al castellano y al francés y la compañía lo ha colgado en internet para que todas las personas que quieran puedan descargarlo y disfrutar de él. «La cosa fue creciendo y se hizo un segundo libro, 'Finding Umberto'», que no está traducido al español y que se detiene de forma más minuciosa en el proceso de creación del primer volumen. «Durante las clases que di con Tatita escribí un diario con reflexiones y mi madre y mi hermanastra hicieron un trabajo brutal de fotos y vídeo documentando el proceso, un segundo libro que enviamos a nuestros mayores con respuestas a las actividades creativas, con fotos de mi abuela y sus consejos», relata el actor, que no sabe aún si se traducirá al castellano también, porque su objetivo a corto plazo es poder realizar cuanto antes actividades presenciales.
A Tatita se le fue la tristeza y volvió a comer. Y con la nueva normalidad ya instalada entre nosotros ha vuelto a su casa de Oviedo, a sus vecinos, su cafetín y sus supermercados, pero ha vuelto cambiada. «Ella está encantada. Siempre fue súper antitecnología, no quería ver un móvil delante, pero a raíz de esto se ha visto capaz, creativa, y cuando volvió a casi lo primero que nos pidió fue que le compráramos una tablet, que le pusiéramos internet en casa y Netflix».