El Museo de Bellas Artes de Asturias cerrará 2024 con 145.000 visitas en otro año de récord

Hay satisfacción en un museo que vivirá un 2025 de muchos cambios. Para empezar, porque el día 1 de febrero Alfonso Palacio, su actual director, se incorporará como director adjunto al Museo del Prado dejando vacante el puesto que ha ocupado durante casi doce años. Es necesario que se ponga en marcha un proceso para seleccionar a su sucesor. Hoy está previsto que se celebre una reunión del patronato y todo indica que podría arrancar ese proceso para iniciar la redacción de las bases, de modo que presumiblemente no será hasta enero cuando pueda estar lista ya de forma definiva esa convocatoria. Habrá entonces que dar un tiempo a los candidatos para que presenten las propuestas y constituir un tribunal que las evalúe en el futuro.

Así las cosas, no parece posible que el 1 de febrero esté designado el nuevo director, motivo por el cual se ha acordado ya el nombre de la persona que ejercerá de interlocutor durante ese periodo de vacío de poder que presumiblemente se va a producir. Será Gabino Busto, el conservador de Arte Antiguo del museo, que conoce muy bien el funcionamiento del mismo. Podría ser ya en primavera cuando se conozca el nombre del director que verá cómo a finales de año o a principios de 2026, puesto que las obras arrancaron con retraso, finaliza todo el proceso de la ampliación, con lo que esto significará para el museo, al lograr por fin hacer operativos los almacenes y mejorar la comunicación y el paso de visitantes entre los edificios que integran el complejo cultural, como son Velarde, ampliación y Oviedo Portal, así como el nuevo que se levantará. Significá también que el museo cuente con su propio salón de actos, con cafetería con vistas a la plaza de la Catedral y con tienda.