Francisco del Cid

CEO de Bosquia y candidato a presidir AJE

«Hay que reivindicar al joven empresario, que se nos respete y nos escuche»

–¿Cómo ve la situación económica de Asturias?

–Asturias está creciendo, sí, pero no podemos quedarnos solo con los titulares. La tasa de actividad sigue siendo baja, el peso de las exportaciones es reducido y seguimos dependiendo demasiado de sectores tradicionales. ¿Y qué significa eso para un joven que quiere emprender aquí? Que hay oportunidades, pero también muchas barreras: trámites lentos, fiscalidad elevada y un entorno que todavía no ve al emprendimiento como motor económico real. Tenemos talento, formación y ganas. Lo que falta es un entorno que acompañe.

–¿Cuáles son las líneas principales de su candidatura?

–Mi propuesta se basa en una idea sencilla: AJE tiene que ser útil para cada socio. Que quien paga la cuota sepa para qué sirve. Y que lo que reciba le compense con creces. Para eso, mis líneas son claras: escucha activa y canales abiertos. Queremos que cualquier socio pueda opinar, proponer y sentirse parte. Aportar valor desde el primer día a través de formación útil, acuerdos con retorno claro y conexiones que generen negocio real. Más comunidad, menos formalismo. Para que los jóvenes empresarios tengamos voz donde se decide nuestro futuro.

–¿Cuáles serán los retos más importantes en AJE?

–El primer reto es conectar con los socios. Hay mucha gente que forma parte de AJE pero no se siente dentro. Recuperar esa conexión es clave: escucharlos, implicarlos y darles razones para quedarse. A nivel organizativo, el reto es hacer que AJE funcione como una red viva y útil. Y fuera de AJE, el reto más grande es reivindicar el papel del joven empresario en Asturias. Que se nos escuche, se nos tenga en cuenta y se nos respete como lo que somos: generadores de empleo, de innovación y de futuro.

–¿Qué es lo más urgente si sale elegido presidente?

–Lo primero será escuchar. Hablar con los socios, uno a uno si hace falta, para entender qué esperan de AJE, qué necesitan y qué les haría volver a sentir que esta es su casa. Mi rol será el mismo que tengo en mis empresas: crear un entorno donde la gente esté cómoda, porque cuando eso pasa, el talento aflora. Y con el 'staff' y la junta directiva activaremos canales de comunicación abiertos, organizaremos el primer encuentro de 'networking' y empezaremos a construir desde la base.