Los asturianos aprueban a Barbón, pero dudan de que resuelva los problemas

El barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) ofrece claves sobre la situación de la región y cómo es percibida por la ciudadanía.

Primer titular: aún hay partido, y mucho. El 22,3% de los encuestados dijo no saber a quién acabaría apoyando. Supone una bolsa notable de indecisos, la tercera mayor del país tras Canarias (27,3%) y Navarra (24,8%). Consolida la idea de que cada vez más ciudadanos decantan el sentido de su papeleta en el último momento.

Segunda consideración: el desgaste de la imagen de Pedro Sánchez importa, pero no lo es todo. El 73,7% asegura que votará en función de «los temas propios de la comunidad», mientras que el 21,5% considera que serán más importantes «los temas generales de España».

El 50,3% de los entrevistados califica la gestión del presidente Adrián Barbón como buena o muy buena, hay un 6,4% que la ve regular, mientras que de mala o muy mala la definieron el 42%.

Ese reparto se traslada luego a la valoración de los líderes. A la hora de puntuar a los candidatos los encuestados otorgan un promedio de 5,6 puntos sobre 10 a Barbón. Es el único que aprueba y lo hace además en todas las franjas de edad, salvo la de quienes están entre los 45 y 54 años. Barbón goza del mayor grado de conocimiento entre los electores, toda vez que solo un 0,9% de los 494 entrevistados dijo no saber quién era.

Diego Canga, el candidato del PP, obtuvo un 4,6 de puntuación pero el barómetro confirma que una de sus debilidades es que un amplio espectro de la ciudadanía sigue sin ubicarle. Un 30,6% de los entrevistados dijo no saber quién era, lo que acentúa su conveniencia de atraer líderes nacionales en su campaña para acaparar más foco. También explica por qué el PSOE minimiza los debates y trata de restarle atención.

El mayor problema de conocimiento personal lo muestran el aspirante de Cs, Manuel Iñarra (desconocido para el 57,4% de los encuestados) seguido de Carolina López, la concejal de Tineo que la dirección de Vox eligió como su cabeza de cartel el pasado 19 de enero; a estas alturas no la identifican un 50,9%. Que pese a ello el barómetro sitúe a la formación en tercera posición evidencia la solidez de la marca. Con ese bajo conocimiento entre los electores, el aspirante naranja obtuvo un 3,85 de nota mientras la candidata de Vox se quedó en e, 3,6.

Covadonga Tomé, candidata de Podemos, sacó un 4,48 y el 33,9% dijo no conocerla. Ovidio Zapico, candidato de Convocatoria por Asturies, recibió una nota del 4,33 y sigue siendo desconocido para el 33,5%, lo que sugiere que no ha rentabilizado su labor como diputado autonómico en las dos últimas legislaturas y su rol como coordinador regional de IU desde 2020.

Adrián Pumares, candidato de Foro, queda detrás, con una valoración del 4,27 sobre 10, y sigue siendo desconocido para el 33,5%, pese a la labor parlamentaria que también viene realizando en la última legislatura.

Existen ciertas dicotomías a la hora de valorar la labor del Gobierno autonómico, la situación de Asturias y su evolución reciente. Así, cuando se pregunta cómo es la situación general de la comunidad en estos momentos, el 40,8% la ve como buena o muy buena. Pero si lo que se quiere saber es si ha mejorado en los últimos cuatro años, la valoración resulta más pesimista. Solo el 31,9% entiende que Asturias está mejor o mucho mejor que en 2019, mientras que los que la ven peor o mucho peor suman el 46,3%.

Del Ejecutivo autonómico, el 45,3% entiende que conoce mucho o bastante cuáles son los problemas de la región, mientras que el 53,6% afirma que sabe poco o nada. Las dudas crecen si se pregunta si ven al Gobierno regional con capacidad para resolver esos problemas: solo el 35% entiende que sabe hacerlo bien o muy bien, mientras que el 63,2% lamenta que los resuelve entre poco y nada.

Al Gobierno sí se le reconoce que sabe comunicarse con la ciudadanía (al menos es lo que perciben el 50,4% de los encuestados, frente al 47,6% que lo niega). También se trataría de un Ejecutivo con sensibilidad con las minorías y los colectivos vulnerables (según el 61% de los entrevistados).

Las entrevistas se realizaron entre el 10 y el 26 de abril. Fueron 494 los consultados. En 2019 pidió opinión a 584 asturianos y las estimaciones de voto que calculó a los partidos presentaron una desviación de entre 1,91 y 5,84 puntos respecto al resultado de las urnas.