Ángela Pumariega: «El Musel no puede ser rehén del sectarismo socialista, Gijón no lo merece»

La vicealcaldesa de Gijón, la popular Ángela Pumariega, censuró ayer duramente tanto el papel que está desempeñando Nieves Roqueñí desde la presidencia del Puerto, como el del PSOE asturiano y gijonés, al que acusó de «colonizar las instituciones públicas». «Exactamente la misma estrategia que sigue Pedro Sánchez a nivel nacional y es inaceptable», dijo.

Para la vicealcaldesa popular, el PSOE «no tiene el menor reparo en asaltar una institución como el Puerto de Gijón, simplemente para obstruir la labor del equipo de gobierno municipal, aunque eso suponga sacrificar el interés general de la ciudad y de todos los gijoneses, especialmente de los vecinos de la zona oeste». Ángela Pumariega calificó de «necesaria y urgente» la regeneración de la zona de los antiguos astilleros de Naval Gijón «tanto para abrir el barrio de El Natahoyo al mar a través del paseo marítimo, como para convertir Naval Azul en un nuevo eje de desarrollo económico para la ciudad».

Ante la negativa de la actual dirección de El Musel a cumplir con el compromiso firmado de ceder gratuitamente esa franja litoral al Consistorio tras la compra del resto de los terrenos por 4,6 millones de euros, la vicealcaldesa se mostró tajante. «El Puerto no puede ser rehén del sectarismo socialista. Gijón no se merece este sabotaje institucional orquestado por un PSOE que se resiste a aceptar su derrota electoral y que prefiere destruir antes que permitir desarrollar su labor al Gobierno que han votado a los gijoneses», afirmó.

Ángela Pumariega reclamó a Nieves Roqueñí que «se preocupe de lo que verdaderamente le atañe, que es la mejora de la competitividad del Puerto, que se ejecuten, de una vez por todas, los nuevos accesos a El Musel, que se ofrezca el impulso necesario a Interzalia o que se recupere, por fin, la autopista del mar». También le pidió a que, desde su posición al frente de la Autoridad Portuaria, «no contribuya a este cerco a Gijón en toda regla». «La ciudad no necesita política de trincheras, sino de progreso», concluyó la vicealcaldesa y portavoz popular en el Ayuntamiento.