Multitudinario Domingo de Ramos: «Hemos recuperado la calle»

Se alzaron los ramos y las palmas en Cimavilla. Cientos de personas se reunieron ayer a mediodía junto a la capilla de los Remedios para que el párroco de San Pedro, Javier Gómez Cuesta, bendijera sus laureles y palmas. «Será una bendición copiosa porque el agua de Cimavilla es la mejor de la villa», advirtió con gracia el párroco del barrio alto. Y dicho y hecho: niños y mayores disfrutaron de un Domingo de Ramos en una plaza de Jovellanos en la que nadie, bien se encargo el cura, quedó sin su ramo bendecido. «Es muy guapo ser padrino, pero hay que ser responsable y espléndidos», advirtió don Javier.

Con el himno nacional que interpretó la agrupación musical Sagrado Corazón comenzó la procesión de La Borriquilla, que además contó con el paso infantil del Santo Niño del Remedio. Nervios pero paso firme de los pequeños. Miembros de las tres cofradías transportaban La Borriquilla, un paso que cuenta con ruedas. «¡Viva la Semana Santa de Gijón!», gritaron los fieles a su paso por el pasadizo de la plaza Mayor.

El Domingo de Ramos, cabe recordar, conmemora la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén. La multitud que iba delante de Jesús -narra la Biblia en el evangelio de San Mateo- le gritaba: «¡Hosanna al hijo de Dios! ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!».

La celebración cristiana sirvió también para que el párroco de San Pedro recriminara al Ayuntamiento su intención de aprobar en abril el reglamento municipal de laicidad. «No hay pueblo en España que no celebre la Semana Santa. La intención del equipo de gobierno de aprobar el reglamento de laicidad es una tozudez sinsentido. Esa norma será una forma más de perder el sentido de la realidad; en Gijón, desde luego, a la vista está que hemos recuperado la calle», criticó el religioso.

El esplendor de los pasos durante su trayecto por el histórico barrio alto no le fue ajeno al párroco gijonés. «El pueblo necesita expresiones de pasión. La comunidad cristiana necesita imágenes que evoquen la pasión hacia Cristo», explicó sobre el arte cristiano, al que calificó como el «más bello y artístico». Igual de multitudinaria fue la misa de las 13 horas donde se leyó la Pasión de San Mateo.

La extensa programación de la Semana Santa gijonesa recoge para hoy un concierto a cargo de la Sociedad Filarmónica de Gijón, que estará bajo la dirección de Elisa García. Se ofrecerán responsorios de Tomás Luis de Victoria, Alfredo de la Roza, Padre Prieto y Nemesio Otaño. Ya mañana se celebrará la procesión Lágrimas de San Pedro, que partirá a las 20.30 horas de la iglesia de San Pedro hasta la de San José.