El PP regional exige la dimisión de Guillermo Peláez: «No hay proyecto para el viejo HUCA»
Califica de «bajeza política» que pida al Ayuntamiento que asuma su compromiso con la plaza de toros, cuando «ese no es el problema de El Cristo»
El viejo HUCA, abandonado y desvalijado con total impunidad, está poniendo en un brete a Guillermo Peláez, el consejero de Hacienda. Sobre su cartera tiene la responsabilidad de sacar adelante una de las operaciones urbanísticas más relevantes de los últimos años y fundamentales para el desarrollo de la Universidad –con la creación de un campus B– y la Administración de Justicia –para la reunificación de los juzgados–.
La suspensión temporal de los derribos en el viejo HUCA –situación por la que Peláez pidió disculpas a los vecinos– y su traslado a 2026 colmó la paciencia del resto de fuerzas políticas. El primero en pedir consecuencias fue el alcalde, Alfredo Canteli, quien instó al presidente del Principado, Adrián Barbón, a señalar a los responsables y «los responsables tienen que dimitir».
El primer en darse por aludido fue Peláez: «Es difícil contestar cuando piden mi dimisión todos los días», comenzó diciendo este martes para después reclamar al alcalde, Alfredo Canteli, «respeto institucional a la hora de hacer valoraciones».
Unas declaraciones que, este miércoles, contestó el PP regional que exigió la dimisión de Guillermo Peláez –esta vez sí directamente– por el abandono del viejo HUCA. «Si hablamos de respeto institucional lo primero que debería hacer el señor Peláez, responsable de esa consejería, es resolver el problema; pero es que ni siquiera tienen un plan para la zona. No hay hoja de ruta, no hay proyecto, no hay soluciones» más de una década después, afirmó el diputado José Agustín Cuervas-Mons.
«Es una auténtica tomadura de pelo que el Gobierno regional haya contratado la democión por más de 4 millones de euros y, a estas alturas, la obra esté paralizada por dos excusas sin sentido». Una decisión –continuó– que calificó como «una burla más a la ciudad de Oviedo».
También consideró «indignante y una bajeza política» que Peláez – y también el portavoz socialista en Oviedo Carlos Fernández Llaneza– exigiera al Ayuntamiento que asuma su compromiso con la plaza de toros «porque el problema de El Cristo no es la plaza de toros –que me consta que el Consistorio tiene el anteproyecto–, sino la situación de los edificios sanitarios en sí».
La postura de IU-Convocatoria por Oviedo
El descontento es generalizado. A pesar de que IU es socio de gobierno del PSOE en el Principado y ostenta la Consejería de Ordenación del Territorio, de la que depende el plan especial de la zona; el concejal de IU-Convocatoria por Oviedo, Gaspar Llamazares, insistió ayer en «que no estamos de acuerdo con los argumentos del gobierno autonómico para la paralización de las obras» y así, pide, «debe defenderlo el Pleno Municipal. El Principado debe tener respeto a los vecinos de El Cristo y el resto de instituciones cumpliendo los plazos establecidos para la demolición». Un asunto que será debatido en el próximo Pleno municipal.