Quinientos efectivos de Policía, seguridad privada y emergencias blindarán las fiestas de San Mateo
El Ayuntamiento instalará dos puestos de mando avanzado en la plaza de la Catedral y en La Ería para asegurar las zonas festivas y sus alrededores
ALBERTO ARCE
OVIEDO.
Miércoles, 31 de agosto 2022, 01:58
Las fiestas de San Mateo volverán en esta edición a la normalidad después de dos años de pandemia, cerrazón y festejos a medio gas, y la presencia de público se prevé multitudinaria en las distintas zonas festivas definidas por el equipo de gobierno local entre el aparcamiento del estadio Carlos Tartiere, en La Ería -donde se celebrarán los conciertos de pago-; el Campo San Francisco o El Antiguo, que se convertirán en el epicentro de casetas de hostelería -en sustitución un año más de los chiringuitos tradicionales- y el mercadillo artesano, entre otras cosas. Hay mucho terreno que cubrir y, para ello, el plan de autoprotección del Ayuntamiento, específico para la ocasión, supondrá el despliegue de medio millar de efectivos de las distintas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado (Policía Nacional y Local, y la Guardia Civil), seguridad privada, emergencias y Protección Civil, tal y como recoge el propio documento, diseñado por el técnico de seguridad sin armas Miguel Romano y adjudicado a Serveco tras la renuncia de Asturiana de Seguridad y Protección.
Un texto que convierte en cifras y operativos lo que para los ovetenses y visitantes que salgan a disfrutar de las fiestas entre el 9 y el 21 de septiembre será solo celebración. La primera, 10.000. Se trata del aforo máximo del recinto de conciertos de La Ería. Un buen puñado de efectivos se encargará de controlar cada día las entradas a la carpa mediante dispositivos electrónicos con lectores de códigos, que pasarán los datos a un sistema informático que determinará en cada momento con exactitud cuántas personas se encuentran en el espacio.
LAS CIFRAS DEL PLAN DE AUTOPROTECCIÓN
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Personas Se trata del aforo máximo permitido en el recinto de conciertos instalado en el aparcamiento del estadio Carlos Tartiere, en La Ería. Para evitar llegar a ese tope, el Ayuntamiento ha establecido que solo se podrán vender 9.000 entradas para cada recital.
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500 Efectivos de las distintas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado -entre Policía Nacional y Local, y Guardia Civil-, seguridad privada, emergencias y Protección Civil, encargados de blindar la seguridad en las distintas zonas festivas de San Mateo.
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2 Puestos de mando avanzado serán instalados por el área municipal de Seguridad Ciudadana en los aledaños del parking de La Ería y en la plaza de la Catedral para controlar la seguridad en la zona de conciertos y en toda la actividad perimetral.
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1.090 Servicios de seguridad se desplegarán, en total, durante todas las celebraciones mateínas -entre el 9 y el 21 de septiembre-, según los cálculos que incluye el plan de autoprotección específico para los festejos encargado por el equipo de gobierno local.
Para no alcanzar nunca ese límite, el número máximo de entradas para cada concierto de San Mateo será de 9.000, para dejar margen de seguridad en caso de emergencia en el interior. Todo ello, al igual que en los grandes festivales, estará coordinado por un jefe de intervención. Además, se contará con personal auxiliar para el control de las personas que deban utilizar las salidas de emergencia.
Al mismo tiempo, el área de Seguridad Ciudadana instalará dos puestos de mando avanzado en La Ería y en la plaza de la Catedral para gestionar tanto la seguridad de los conciertos como toda la actividad perimetral en torno a los distintos núcleos festivos.
Fue el pasado viernes cuando los concejales de Seguridad Ciudadana y Festejos, José Ramón Prado y Covadonga Díaz, respectivamente, cerraron los detalles del plan de autoprotección durante una reunión de coordinación celebrada en el edificio del Rubín en la que participaron representantes de todos los cuerpos y servicios que formarán parte del operativo. En total, el gobierno local calcula que se realizarán un total de 1.090 servicios durante las fiestas.
Dispositivos antibotellón
El plan tiene en cuenta y pone énfasis el bagaje pandémico de estos dos años; sin embargo, dado la escasa incidencia en estos momentos en toda la región, no va más allá de recomendar «una actitud preventiva y responsable, llevando a cabo las medidas higiénicas adecuadas» en cada caso. Eso sí, donde pone el foco es en la persecución del botellón, para lo que se implementarán dispositivos especiales en zonas como la manzana de bares de copas y discotecas que dibuja el casco antiguo.
A esto se sumará la vigilancia y actuación frente a actividades de venta ambulante no autorizadas, singularmente el «top manta»; y, por último, el control de horarios de establecimientos e instalaciones fijas o eventuales en las diferentes ubicaciones del centro histórico y zonas habilitadas para actividades musicales.
