Borrar
Marcelina Bartual, a la izquierda, junto a los Reyes, la Princesa, la Infanta y una de sus hijas, en el corredor. Damián Arienza

Premios Princesa | La Familia Real promete volver a Asiegu: «Ese paisaje hay que verlo»

Los Reyes y sus hijas quieren regresar a Asiegu tras quedarse prendados del pueblo y no poder disfrutar de las vistas de los Picos por la lluvia

lucía ramos

Domingo, 20 de octubre 2019, 06:50

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

Asiegu engancha. Ya lo dicen sus vecinos, quienes año tras año comprueban cómo muchos visitantes regresan una y otra vez. Los últimos en 'caer' en las encantadoras redes de esta aldea Ejemplar fueron los mismos Reyes, así como sus hijas, doña Leonor y doña Sofía. Y es que aún no se habían ido del pueblo y ya estaban prometiendo volver. Así se lo manifestaron a más de un parroquiano de los muchos con los que ayer hablaron durante su visita para hacer entrega del premio al Pueblo Ejemplar de Asturias 2019. Prometieron volver para recorrer sus empinadas caleyas con más calma y tranquilidad, pero, sobre todo, para poder disfrutar de las vistas de los Picos de Europa que ofrece este balcón privilegiado que se descuelga a más de cuatrocientos metros de altitud desde la ladera de la sierra del Cuera.

Y es que la incesante lluvia no solo obligó a cambiar el recorrido, eliminando, por ejemplo, la parada en el mirador Pedro Udaondo; también ocultó las rocosas cumbres de Picos, entre ellas el Urriellu, tras densas nubes. «La casa les gustó mucho, sobre todo el corredor, aunque lamentaron no poder disfrutar de las vistas que ofrece», explicaba Marcelina Bartual, propietaria de una de las viviendas más antiguas de Asiegu, del siglo XVII, donde tuvo el honor de recibir a la Familia Real. «Nunca pensé que los tendría de invitados», reconocía, aún abrumada, y recalcaba la «enorme simpatía» de la Princesa y la infanta.

Antes de la parada en casa de Marcelina, la comitiva Real había visitado la Quesería La Pandiella, la que mayor producción tiene de la DOPCabrales. Allí, su propietario, el joven JoséMiguel Mier, les explicó cómo trabajan. «Les llamó mucho la atención el proceso e hicieron varias preguntas sobre el suero y el hecho de que no se prense la cuajada», relató.

Ya en Las Prunales, los Reyes y sus hijas pudieron contemplar la obra 'La Venida de les Vaques', ideada por varios vecinos del pueblo y diseñada por el escultor José Sahagún, quien recalcó cómo «lo más bonito es lo que significa para el pueblo y cómo todos trabajaron unidos y muy duro para preparar el camino». También conversaron con Javier Niembro, uno de los impulsores de la candidatura y cuyo hermano, Manuel, fue el encargado de explicar, minutos después, el proceso de elaboración de su sidra de casería en el Llagar Pamirandi. «Les llamó mucho la atención el aroma y se interesaron por cómo nosotros tenemos nuestras pumaradas, elaboramos la sidra y la vendemos en el bar», señaló.

La Familia Real también visitó la otra quesería del pueblo, Asiegu, regentada por los jóvenes Rocío Bueno y Pablo Ruiz. Ambos les recibieron ataviados con trajes tradicionales y acompañados por sus hijas, Vega, de dos años, y Amaia, de cuatro meses. Esta última llamó la atención de la Reina Letizia, quien la tomó en brazos al tiempo que comentaba con sus padres «lo bonito e importante que es el que haya niños pequeños en los pueblos».

Tras la visita a la casa de Marcelina, los Reyes y sus hijas mantuvieron un breve encuentro con los niños del pueblo, que ha logrado dar la vuelta a la sangría demográfica que estaba sufriendo en las últimas décadas. Fue entonces el turno de Xuan y Nel Niembro Caso, los hermanos que interpretaron con gaita y tambor una 'Jota de Cangas' que encandiló a la Reina, quien incluso les pidió un bis. «No solemos aceptar peticiones, pero al pedírnoslo ella, que fue muy amable además, lo hicimos», explicarían más tarde los pequeños músicos.

Finalmente la comitiva Real se acercó hasta la iglesia de San Miguel, a cuyo interior se trasladó el Corri Corri al no poder interpretarse en la calle por la fuerte lluvia. Les recibieron los sacerdotes Pedro Fernández y Daniel Rojo, así como el restaurador Jesús Puras. «Quedaron prendados con las pinturas de la que llamamos la 'Capilla Sixtina de Cabrales'», indicó Fernández. Muy especiales fueron también los tradicionales cantos que las mozas de Asiegu ofrecieron al ramu. «Adaptamos las estrofas para dedicárselas a la Familia Real y agradecer su visita», explicó Verónica Guerra.

Los Reyes también se mostraron maravillados con la Banda de Gaitas Picos de Europa DOPCabrales, encargada de amenizar el acto institucional. «Alabaron nuestra música y el Rey subrayó el mérito que tiene actuar y aguantar bajo el aguacero», señaló el director de la agrupación, Héctor Braga.

Tras tener que suspender la visita al mirador, el veterano guarda Tomás Fernández quiso hacer llegar la esencia de Picos a la Familia Real regalándoles unas insignias del Urriellu. «Volveremos, ese paisaje hay que verlo», le aseguró la Reina.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios