Una marea de carbón en la playa reabre el debate en Gijón

En la víspera de un Pleno que incluye un debate sobre el origen del carbón que periódicamente cubre la playa de San Lorenzo, el arenal amaneció ayer teñido una vez más de negro. En esta ocasión, a diferencia de otras en las que el sedimento se concentra en la zona más próxima a San Pedro, la mancha ocupó una gran franja entre las escaleras 6 y 13. Y junto a la gravilla habitual se pudieron recoger grandes piedras, algunas del tamaño de un puño.

La casualidad quiso que el episodio coincidiera con una jornada que el Instituto Nacional del Carbón (Incar), dependiente del Centro Superior de Investigaciones Científicas, tenía programada para la toma de muestras en la bahía, con la intención de para continuar con el estudio que están desarrollando para tratar de esclarecer el origen del mineral. Como adelantó EL COMERCIO, los primeros resultados apuntan al movimiento de graneles en el puerto. Pero los científicos quieren ahondar aún más en este análisis, que se extenderá a otros concejos, hasta la desembocadura del Nalón.

Los encargados de recoger el carbón, de escalera en escalera y ante la mirada curiosa de quienes paseaban por la playa, fueron Isabel Suárez-Ruiz y Dionisio Luis García, dos de los cinco firmantes del mencionado estudio, para el que se tomaron como base muestras del afloramiento que tuvo lugar en febrero. Ataviados con el instrumental específico, se iban desplazando por la playa, fotografiaban el lugar elegido para cada toma y, tras registrar su posición exacta, recogían la superficie de arena y carbón para despositarla en una bolsa, oportunamente etiquetada. Todas estas muestras serán procesadas en el laboratorio, donde este mineral se separará grano a grano del sedimento natural de la playa para su posterior análisis petrográfico. Mediante la medición de luz reflejada, este proceso permitirá determinar sus componentes.

A raíz de las primeras conclusiones del estudio, que contradecía una teoría oficial que apuntaba como origen la carga del 'Castillo de Salas' -hundido en 1983-, el PP presentó para su debate en el Pleno de hoy una iniciativa en la que insta al Ayuntamiento a «comprometer los recursos municipales que sean necesarios» para averiguar su procedencia y que «comprometa a la Autoridad Portuaria en el esclarecimiento de estas causas».

El concejal Esteban Aparicio consideró que «este problema solo se solucionará con el tiempo o con operaciones costosísimas», recordando que, al margen de la carga del 'Castillo de Salas', «El Musel fue durante un tercio de siglo el primer puerto carbonero de España». Recordó que la Autoridad Portuaria tiene planes de inversión con medidas para contener la dispersión del carbón por el aire, «que si vuela no se deposita», a lo que añadió que «según la UE, el tráfico carbonero tiene sus días contados».

«Ahora tenemos la certeza de que el carbón no viene solo del barco hundido y el Ayuntamiento debe hacer los trámites pertinentes para determinar con exactitud su procedencia», dijo David Alonso, de Xixón Sí Puede. «Cada vez hay más interrogantes y el gobierno ni está ni se le espera», anotó Aurelio Martín, de IU. Ciudadanos cree que «hay pocas dudas de que viene en buena medida del puerto. Urge hacer las inversiones necesarias para poner mecanismos de abrigo o contención de los depósitos».