Borrar
Urgente Un accidente provoca retenciones en la A-66 en Mieres
Una niña, en la vuelta al cole. J. C. Román
Miércoles con Lucía Feito, psicóloga

La vuelta al cole sin dramas: cómo acompañar a nuestros hijos según su edad

La psicóloga Lucía Feito señala que cada etapa académica «tiene sus retos y, como madres y padres, podemos apoyarles de manera distinta»

Lucía Feito

Oviedo

Miércoles, 3 de septiembre 2025, 09:14

Comenta

Con septiembre llega la vuelta al cole. Para muchos niños y niñas supone reencontrarse con amigos, volver a la rutina y seguir aprendiendo. Pero también puede generar nervios, miedos o resistencia. No es lo mismo acompañar a un niño que empieza por primera vez en infantil, que a un adolescente que vuelve tras el verano. Cada etapa tiene sus retos, y como madres y padres, podemos apoyarles de manera distinta.

Cuando empiezan el cole por primera vez

El inicio en el colegio es un momento muy especial, tanto para los niños como para las familias. Es habitual que aparezcan lágrimas en las primeras separaciones. No significa que lo estén pasando mal en el aula, sino que el proceso de adaptación lleva tiempo.

  • Qué hacer: transmite confianza en su capacidad para estar en el cole. Una despedida breve y segura («te recojo después de la merienda») es más útil que alargar el adiós.

  • Ejemplo real: algunos niños lloran al entrar y a los pocos minutos ya están jugando dentro. Si como adultos mantenemos la calma, el proceso se suaviza.

Educación Infantil (3-6 años)

En estas edades los pequeños aún dependen mucho del acompañamiento adulto y las rutinas son clave.

  • Retos habituales: el cansancio tras las primeras jornadas, las rabietas a la salida o las dificultades para madrugar.

  • Qué hacer: establecer horarios de sueño y comidas unos días antes de empezar; preparar la mochila juntos; mantener pequeños rituales (un abrazo especial al despedirse).

  • Ejemplo real: una niña que volvía agotada y de mal humor del cole mejoró cuando sus padres ajustaron la hora de dormir media hora antes.

Educación Primaria (6-12 años)

Es la etapa de afianzar aprendizajes, amistades y hábitos. Aquí surgen otras dificultades: miedo a no encajar en el grupo, preocupación por los deberes o nervios antes de conocer al nuevo profesor.

  • Retos habituales: niños que dicen «no quiero ir» porque les da miedo el cambio de curso o porque sienten presión académica.

  • Qué hacer: hablar sobre lo que les espera («vas a conocer a compañeros nuevos, seguro que hay cosas que te gustan de este curso»), validar sus emociones y reforzar la importancia del juego tras el cole.

  • Ejemplo real: un niño que se bloqueaba con los deberes mejoró cuando sus padres dividieron la tarea en pequeños pasos y le dejaron descansar entre medias.

Educación Secundaria Obligatoria (12-16 años)

En la ESO aparecen grandes cambios físicos, emocionales y sociales. Los amigos se convierten en el centro y la búsqueda de independencia puede chocar con las normas familiares.

  • Retos habituales: quejas por los horarios, comparaciones con compañeros, dificultad para organizarse o sentimientos de inseguridad.

  • Qué hacer: mostrar interés sin invadir, establecer normas claras en casa (horas de estudio, uso de pantallas), y darles espacios de confianza para expresar sus emociones.

  • Ejemplo real: un chico que no contaba nada en casa comenzó a hacerlo cuando sus padres redujeron las preguntas directas y aprovecharon los ratos de paseo o de coche para conversar.

Bachillerato (16-18 años)

En esta etapa aparece con fuerza la presión académica: exámenes importantes, la decisión de qué hacer después del instituto y la sensación de que «todo cuenta».

  • Retos habituales: ansiedad por las notas, miedo al futuro, exceso de autoexigencia o cansancio por el volumen de estudio.

  • Qué hacer: ayudar a planificar tiempos de estudio y descanso, reforzar que el valor personal no depende de las calificaciones y ofrecer apoyo sin añadir más presión.

  • Ejemplo real: una estudiante que no podía dormir por los nervios mejoró cuando sus padres la animaron a hacer pausas, cuidar el descanso y entender que pedir ayuda no es un fracaso.

Un consejo transversal para todas las edades

Nuestros hijos observan cómo vivimos nosotros la vuelta a la rutina. Si la afrontamos con calma, orden y optimismo, ellos también lo harán. Y no olvidemos que la vuelta al cole es también una oportunidad para reforzar la autonomía, la confianza y los lazos familiares.

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Publicidad

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

elcomercio La vuelta al cole sin dramas: cómo acompañar a nuestros hijos según su edad

La vuelta al cole sin dramas: cómo acompañar a nuestros hijos según su edad