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Concentración en defensa del empleo en Vesuvius, frente a la Catedral de Oviedo. E. C.
La negociación del ERE de Vesuvius llega a su último día con posturas alejadas

La negociación del ERE de Vesuvius llega a su último día con posturas alejadas

La plantilla tratará de alargar el periodo de consultas en una reunión en el Sasec apenas trece horas antes de que finalice el plazo

Ó. P.

GIJÓN.

Lunes, 14 de octubre 2019, 02:35

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Trece horas. Ese es el plazo que tienen los trabajadores de Vesuvius desde el inicio de su reunión con la empresa en el Sasec hasta el fin del periodo de negociación que marca la ley antes de hacer efectivo un ERE de extinción como el que plantea la multinacional. Según adelantaron los representantes sindicales en los últimos días, la propuesta que llevarán hoy al encuentro incidirá en el mantenimiento del empleo, tal y como llevan haciendo desde el inicio de la negociación, a través de la búsqueda de alternativas que mantengan la producción, un extremo que hasta ahora la compañía no ha contemplado. En la última reunión, los trabajadores propusieron aplicar un ERTE a la planta durante un año para así ofrecer a la dirección una herramienta «flexible» que le permita modular la producción en función de las demandas del mercado.

Para mantener activa la presión social sobre la empresa, decenas de trabajadores, acompañados por familiares y simpatizantes, se volvieron a concentrar ayer frente a la Catedral de Oviedo para dar apoyo a los tres empleados encerrados en el templo. De momento, la última propuesta de la empresa pasaba por estudiar una ampliación del periodo de consultas siempre y cuando la plantilla accediera a negociar, exclusivamente, los detalles de los despidos.

La portavoz de Podemos en la Junta General, Lorena Gil, mostró ayer su apoyo a los trabajadores de la planta, cuyo futuro «pende de un hilo» tras varias semanas de negociación infructuosa. A su juicio, es necesario «buscar una solución de futuro a una factoría con beneficios y que ha contribuido a unos resultados que la dirección de Vesuvius considera excelentes». En caso de que la empresa no ceda a la presión laboral y social, Gil sostiene que el Gobierno socialista debe dar un paso al frente e intervenir. «La industria asturiana no puede permitirse un solo cierre más, y un gobierno del PSOE debe estar dispuesto a dar pasos valientes como tomar el control de los activos y negociar a partir de ahí», afirma.

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